En el día de hoy, os escribo acerca de un tema bastante hablado hoy en día, él si estamos viviendo una Cuarta Revolución Industrial. Para ello, os voy a mencionar una serie de argumentos tanto a favor como en contra, y por último daré mi opinión al respecto. Antes de empezar, me gustaría resaltar algo muy importante, esto es, la creación de robots. Como sabréis, es algo muy novedoso de esta época.
Para empezar, os voy a explicar los argumentos que he encontrado a favor, es decir, SÍ estamos viviendo una Cuarta Revolución Industrial. En el primer argumento, lo que quiero resaltar es la aparición de nuevas tecnologías en esta época, en las que se incluye la más impresionante, los robots. Estos robots, cada vez más, están apareciendo en nuestras vidas, y a su vez las están transformando tanto positiva como negativamente. Tan solo el hecho de su creación ya está suponiendo una Revolución en muchos sectores, por lo que se podría decir que está siendo un detonante de esta Revolución Industrial. A su vez, muchos trabajadores constan de robots como compañeros, por lo que la existencia de estas máquinas, no está siendo de perfil bajo, se nota en la mayoría de los ámbitos industriales, y en algunos ámbitos de servicios. El tercer argumento para este lado sería el uso de energías renovables. Anteriormente, las fuentes de energías más utilizadas solían ser, el carbón, y el petróleo, pero en la actualidad muchos sectores están tratando de obviar estas fuentes de energía, y tratan de usar energías como la procedente del aire, eólica, o la procedente del sol, solar.
Por otro lado, están los argumentos en contra, es decir, NO estamos viviendo una Cuarta Revolución Industrial. El primer argumento a tratar es la creación de nuevos puestos de trabajo. Este argumento puede sonar muy contradictorio, debido a que la mayoría de las personas creen que con los robots o con la nuevas tecnologías muchos trabajos desaparecerán, como por ejemplo el de cartero. Pero sinceramente estos necesitarán muchas mano de obra para controlarlos, crearlos o repararlos. Esto quiere decir que todavía no existen robots capaz de crear otro robots o repararse ellos mismos, sino que necesitan un ser humano capaz de realizar estas actividades por ellos. Los últimos argumentos son: la carencia de sentimientos de estas máquinas, y la falta de confianza que tienen muchas personas hacia ellas. Con respecto a los sentimientos, los robots no pueden ofrecer ni amor, ni empatía, ni comprensión a los ciudadanos, algo muy importante en el sector servicios. Por último, con respecto a la confianza, un número elevado de personas prefieren ser tratadas por personas antes que por robots, debido a la falta de confianza que tienen hacia estos artilugios.
En conclusión, desde mi punto de vista No estamos viviendo una Cuarta Revolución Industrial. Los robots están realizando un gran cambio en nuestra sociedad, pero nunca serán capaces de sustituir a un humano, o realizar todas las tareas como lo hace él. En definitiva, nunca serán valorados como una persona, por lo que no está suponiendo un grandísimo cambio, sino que están siendo unas nuevas herramientas de trabajo.
